Para el profesor Darío Mugno, guía de alta montaña EPGAMT y Maestro No de Rastro NOLS, el senderismo [traducción de trekking en español] puede ocupar un lugar central dentro del ámbito educativo, en todos los niveles. Una de las claves está en la planificación, para adaptar el tiempo disponible. Suelen ser caminatas extensas, pero eso no es un obstáculo, en especial en Mar del Plata, una ciudad que cuenta con sierras, lagunas y playas en las cercanías, todos lugares óptimos para realizar la actividad.
Desde su punto de vista, el trekking se puede entender como el desplazamiento en algún sendero. Según autores españoles, es una actividad dinámica a pie que persigue dos factores determinantes: la programación y la ejecución. Es una actividad que tiene un fin en sí mismo y también es un medio para realizar otras actividades en un lugar específico.
En este sentido, en relación al contenido y al proceso de aprendizaje, Mugno señala que se produce de manera continua y progresiva. Lo importante es crear un clima para que los y las alumnas se sientan cómodas. Ser parte de la vivencia los lleva al camino de la teoría. También considera que el factor sorpresa juega su papel: incorporar al senderismo en las clases posibilita situaciones educativas fuera de la estructura convencional del colegio, convirtiéndose en un espacio atractivo y motivador para el alumnado.
La propuesta didáctica del trekking –agrega– trabaja sobre tres ejes fundamentales. El plano cognitivo, que permite explorar el medio natural y sus conocimientos de forma directa. El plano afectivo, con trabajos y experiencias colaborativas en grupo y búsqueda de objetivos concretos. Y el plano motor, con movimiento en diferentes superficies del (casi) infinito medio natural.
Los senderos se clasifican en grupos distintos. Por distancia, de gran o pequeño recorrido, y locales. Y por dificultad: baja, media o alta. La severidad del medio natural se mide debido al riesgo: exento, con pocos o con muchos factores. En base a esta evaluación, se pueden modificar los circuitos para evitar el peligro.
En esa línea se decide la orientación del recorrido, con sus caminos programados. Por último, el profesor evalúa el desplazamiento con las características que surgen de los senderos a transitar. Todas estas clasificaciones, comparadas con el grupo de trabajo, definen la duración del tiempo de esfuerzo en la actividad.
Los primeros pasos de una clase para experimentar en la naturaleza.