En los últimos años, los aportes de metodologías o formas de planificar como la Periodización Táctica y el microciclo estructurado aportaron elementos y presupuestos teóricos y prácticos de inmenso valor a nuestra búsqueda de poder diseñar una metodología propia y adecuada a cada contexto futbolístico que nos toque enfrentar (y, obviamente, en la mejora de nuestro juego).
En este aspecto, es importante detenerse en el Principio de Alternancia Horizontal de la carga en Especificidad, uno de los principios más importantes de la Periodización Táctica. ¿Por qué? Porque nos guía respecto a qué tipo de ejercitaciones diseñar para adquirir una forma de juego, algo que hemos corroborado en nuestra labor de preparadores físicos de fútbol.
Este principio nos permite cumplir, en principio, con los dos objetivos fundamentales de la preparación física en el fútbol (como deporte complejo):
1- Prevenir lesiones.
2- Mejorar el rendimiento futbolístico del jugador.
Es necesario que haya una alternancia horizontal al nivel del tipo de contracción dominante, según tenga tensión, duración o velocidad, sin dejar por ello de existir especificidad. Según Gaiteiro (2006), esta alternancia sucede horizontalmente a lo largo del Morfociclo y se da porque se alterna en forma horizontal lo que es dominante de entrenamiento a entrenamiento, y no entre ejercicios de la sesión, lo cual va a permitir que no se genere un sobre-entrenamiento.
Este es el principio encargado de regular la relación existente entre esfuerzo y recuperación y garantiza esa relación distribuyendo semanalmente diferentes escalas del jugar (Gomes 2008).
Acá dejamos un pequeño aporte de experiencia personal de los últimos 5 años, donde a cada subdinámica le desarrollamos un ítem en cuanto a la prevención de lesiones como entrenamiento complementario (cabe destacar que va en relación a lo que haremos en el campo ese día).
Entrenamiento complementario / Preventivo/ Protector: Ejercicios excéntricos.
Entrenamiento en campo: Rueda de pases / Funcionamiento defensivo-ofensivo sin oposición / Juegos reducidos de posesión / Driles técnicos / Grupo compensación.
Entrenamiento complementario / Preventivo/ Protector: Ejercicios propioceptivos bases estables
Entrenamiento en campo: Juegos reducidos hasta 5vs5 / Duelos 1vs1, 2vs2 / Rondos conceptuales / Rondos con subespacios / Driles de fintas y cambios de dirección
Entrenamiento complementario / Preventivo: Ejercicios de Core / Zona media.
Entrenamiento en campo: Driles técnicos en todo el campo / Funcionamiento defensivo y ofensivo / Juegos de posesión en grandes espacios / Fútbol Formal 11 vs 11 / Fútbol condicionado.
Entrenamiento complementario / Preventivo / Protector: Ejercicios de fuerza en gimnasio / Tren superior.
Entrenamiento en campo: Ruedas de pases con desmarques / Transiciones defensivas y ofensivas / Velocidad contextualizada / Juegos reducidos / Juegos cognitivos.
Entrenamiento complementario / Preventivo / Protector: Ejercicios amplitud de movimiento.
Entrenamiento en campo: Juego socioafectivos / Acciones Tácticas / Acciones a balón detenido / Funcionamiento colectivo / Ruedas de pases / Grupo compensación.
En mi caso, utilizo este principio desde hace más de 8 años, y los aportes en el aspecto de prevención han sido innumerables. Les dejo este gráfico con datos personales para que se pueda dimensionar la real relevancia del proceso.
Las celdas en color azul representan equipos en el que no aplicaba este principio y las celdas en color verde la utilización de la Alternancia Horizontal de la carga en especificidad.
Para comparar, detallamos la cantidad de lesiones por tiempo de exposición, lo cual establecemos de acuerdo a la fórmula, para sacar el índice lesivo.
Para el cálculo de la incidencia de lesión en fútbol profesional, el modelo que propone la UEFA (Walden et al., 2005b) es el más usado. Para ello, se debe registrar la exposición de manera individual de cada uno de los jugadores, cubriendo todos los entrenamientos como los partidos de competición en los que este participe. Este registro temporal se realizará en minutos. Además, se cuantificará el número de lesiones que se hayan producido en ese periodo de tiempo, de cada uno de los jugadores que se anotó su exposición a la práctica del fútbol, ya fuese entrenando o compitiendo.
N° de Nuevas Lesiones x 1000hs
Tiempo de Exposición (Cantidad de jugadores por día X horas de trabajo por día)
Cabe destacar que aquí solo consideramos lesiones musculares y no todos los tipos de lesión. Por eso no establecemos comparaciones con valores referenciales en diferentes estudios.
Sin la utilización del principio de alternancia en esas 4 experiencias, el promedio fue de 0,98 lesiones por jugador cada 1000 horas de exposición; y, utilizando el principio de alternancia horizontal de la carga el promedio de las otras 5 experiencias, fue de 0,48 lesiones por jugador.
Por lo tanto, podemos calcular que ha habido una disminución en el índice lesional del 48,9%, un número, claro está, sumamente significativo para no tener en cuenta y para no comenzar a utilizar este gran principio.
Seguramente quedarán muchos interrogantes. Uno, por ejemplo: ¿Cuándo hacer la subdinámica de recuperación pasiva? Es decir, si el día post partido o el día 2 después de la competencia. Esto lo desarrollaremos en otro posteo, pero se podrá saber siempre y cuando tengamos la certeza de la relevancia de este principio como eje y guía en el diseño de nuestra semana.
El principio de Alternancia Horizontal en especificidad nos ha permitido, según nuestra experiencia:
◾ Disminuir el índice lesivo de nuestros jugadores en un 48,9% al año.
◾ Organizar la dinámica semanal con un orden metodológico que prioriza tipo de contracción por día para adaptar y maximizar sin sobreentrenar.
◾ Optimizar la forma de jugar basada en las diferentes subdinámicas, lo que permite generar entrenamientos sobre distintos principios y subprincipios.
◾ Desarrollar mecanismos preventivos por subdinámica en relación a lo que se trabaja en campo en ese día.
por el Prof. Fernando López, integrante del staff TRAIN Football.
